Son tan bonitos y representan tanto… Todos los tiempos parecen quedar contenidos en ellos, y uno se detiene a mirarlos. Nuestro bebé, único y mágico. Nuestro deseo es colmarlo de amor y darle la bienvenida. Un regalo de oro le recordará toda su vida cuánto lo quieres, lo amado y deseado que es.
Para nosotras, este regalo que nos ofrece el padre es una joya irremplazable: nos da seguridad, nos hace sentir valoradas y queridas y… nos hace muchísima ilusión. Es nuestro nuevo galón de madre, nuestro orgullo.
Las medias alianzas son las reinas para estas ocasiones, al igual que una delicada gargantilla de diamantes. Igualmente, hay una amplia gama de complementos en plata, superdulces, que ayudan a crear ese ambiente tierno en el que disfrutar de esta hermosa etapa de nuestra vida: puntos de luz, cajitas, marcos, conchas de bautismo… recuerdos perfectos de un momento irrepetible.